Era se una vez, en un pueblo pintoresco llamado Valenciavillepiedradentroaguaesquinamojada, vivía Helena, una joven inteligente, romántica y empedernida que soñaba con encontrar a su sapo encantador. Mientras pasaba su tiempo libre leyendo sobre novelas románticas filosóficas, y viendo películas románticas de terror, su amiga, Carolina, se burlaba de su obsesión por las historias románticas perfecta soñadora.
Un día, caminado por un parque, Helena se encontró con un chico llamado Anier. Él tenía el pelo despeinado, una camiseta manchada y unas zapatillas deportivas desgastadas. ¡Era todo lo contrario a lo que Helena imaginaba como el hombre perfecto! Aun así, Helena decidió darle una oportunidad a Anier, soñando que estaba en una de esas "historias para chicas" donde el chico imperfecto se convertía en el sapo encantador. Pasaron los días juntos, pero cada encuentro era más cómico que romántico, en lugar de mandarle mensajes de buenos días, Anier le mandaba memes de futbolistas. En lugar de llevarla a cenas románticas, la llevaba a comer al estadio de Pedro Marrero, donde la comida era más rápida y hasta le robaba sus papitas fritas.
Helena, con el tiempo, se daba de cuenta que su historia de amor estaba lejos de ser perfecta, pero encontraba felicidad en momento inesperado, sobre todo cuando veía el bulto de Mbappé, y sobre todo divertidos que trataba de compartir con Anier. Descubrió que no necesitaba su sapo encantador, sino alguien que le hiciera disfrutar de la vida, hacerla reír. Un día caminando de nuevo por las cercanías del Pedro Marrero, Anier tropezó con una piedra y cayó al suelo, se rompió el cuello, y se acabó la historia. Pues en vez de Helena en lugar de ayudarlo estalló en carcajada, autoseguido Anier también comenzó a reír, y desde ese momento supieron, que por muy extraña sea su bipolaridad, digo extraña sea la relación, así de como tal era perfecta.
Y así queridos lectores, luego de que me erizo con esta historia, Helena y Anier, siguieron viviendo su historia poco convencional, Helena con sus historias de amor, y Anier con sus futbolistas, y a pesar de que su historia es algo muy parecido a las historias de chicas que están acostumbradas a leer muchas, cualquier persona que disfruta de un romance fuera de lo común, sabrá que al los días Helena pedirá el divorcio.
Aunque seguro que muchos ser darán de cuenta, que el amor verdadero no tiene que ser perfecto, sino que debe ser auténtico y hacer que ambos sean felices, y aceptarse tal y como son, y al final verán que Helena, a pesar de esperar un Sapo Encantador, fue un "historia de amor" que Helena jamás pudo haber imaginado.
¡Quiero el divorcio!.
Gracias por leerme, esperen sentado la otra "Historia para chicas"
Un día, caminado por un parque, Helena se encontró con un chico llamado Anier. Él tenía el pelo despeinado, una camiseta manchada y unas zapatillas deportivas desgastadas. ¡Era todo lo contrario a lo que Helena imaginaba como el hombre perfecto! Aun así, Helena decidió darle una oportunidad a Anier, soñando que estaba en una de esas "historias para chicas" donde el chico imperfecto se convertía en el sapo encantador. Pasaron los días juntos, pero cada encuentro era más cómico que romántico, en lugar de mandarle mensajes de buenos días, Anier le mandaba memes de futbolistas. En lugar de llevarla a cenas románticas, la llevaba a comer al estadio de Pedro Marrero, donde la comida era más rápida y hasta le robaba sus papitas fritas.
Helena, con el tiempo, se daba de cuenta que su historia de amor estaba lejos de ser perfecta, pero encontraba felicidad en momento inesperado, sobre todo cuando veía el bulto de Mbappé, y sobre todo divertidos que trataba de compartir con Anier. Descubrió que no necesitaba su sapo encantador, sino alguien que le hiciera disfrutar de la vida, hacerla reír. Un día caminando de nuevo por las cercanías del Pedro Marrero, Anier tropezó con una piedra y cayó al suelo, se rompió el cuello, y se acabó la historia. Pues en vez de Helena en lugar de ayudarlo estalló en carcajada, autoseguido Anier también comenzó a reír, y desde ese momento supieron, que por muy extraña sea su bipolaridad, digo extraña sea la relación, así de como tal era perfecta.
Y así queridos lectores, luego de que me erizo con esta historia, Helena y Anier, siguieron viviendo su historia poco convencional, Helena con sus historias de amor, y Anier con sus futbolistas, y a pesar de que su historia es algo muy parecido a las historias de chicas que están acostumbradas a leer muchas, cualquier persona que disfruta de un romance fuera de lo común, sabrá que al los días Helena pedirá el divorcio.
Aunque seguro que muchos ser darán de cuenta, que el amor verdadero no tiene que ser perfecto, sino que debe ser auténtico y hacer que ambos sean felices, y aceptarse tal y como son, y al final verán que Helena, a pesar de esperar un Sapo Encantador, fue un "historia de amor" que Helena jamás pudo haber imaginado.
¡Quiero el divorcio!.
Gracias por leerme, esperen sentado la otra "Historia para chicas"
