Articulo Martes de estudio

Tostoncito Ricote

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Toca estudiar para una prueba, es el último día, no he estudiado antes. Mañana no quedará más remedio que enfrentarse a la evaluación de la profesora. Pero ahora debo estudiar así que lo preparo todo, un plan mental infalible. Sin embargo, no puedo comenzar pues me levanté tarde y debo realizar varias acciones básicas de la vida diaria así como ayudar a otra persona por la que espero unas horas. Así que mato ese tiempo escaso con algunos vídeos de Dross. No vaya a ser que corte el estudio a medio progreso y después se me olviden las cosas o no haya forma de continuar. Así que llega la otra persona, la ayudo y vuelvo a mi estado, listo para empezar a estudiar, pero sigo viendo un video que se me quedó a medias. Llevo ya no sé cuántos vídeos de Dross. Me entra sueño y termino durmiendo. Disfruto sueños súper interesantes, hace tiempo que no sueño así que fue un buen día. Pero ya son más de las siete y no he estudiado. Así que toca seguir con las tareas básicas de la vida mientras veo más videos, no solo de Dross. Debo ya recargar el móvil, me he quedado sin datos. Tal vez sea señal de que me ponga a estudiar. Pero recargo el móvil y sigo viendo vídeos, esta vez me dejo llevar por lo que me comparte el algoritmo de YouTube sin preguntar ni cuestionar. Me pierdo en la idea de buscar los programas de radio de Milenio 3 y termino asombrado por el hecho de encontrar sin mucha dificultad prácticamente todos los programas; habiéndolos buscado en anteriores ocasiones sin un resultado tan positivo, pero estaban subidos al Internet desde 2020 a un paso del buscador. Así que descargo el primer capítulo y guardo la primera temporada en mi nube. Luego me pongo a reflexionar de que son más de las nueve de la noche y no he estudiado mientras escucho el primer capítulo de Milenio 3. Qué puedo hacer para no desaprobar, me pregunto, no me respondo. Creo que
 
Toca estudiar para una prueba, es el último día, no he estudiado antes. Mañana no quedará más remedio que enfrentarse a la evaluación de la profesora. Pero ahora debo estudiar así que lo preparo todo, un plan mental infalible. Sin embargo, no puedo comenzar pues me levanté tarde y debo realizar varias acciones básicas de la vida diaria así como ayudar a otra persona por la que espero unas horas. Así que mato ese tiempo escaso con algunos vídeos de Dross. No vaya a ser que corte el estudio a medio progreso y después se me olviden las cosas o no haya forma de continuar. Así que llega la otra persona, la ayudo y vuelvo a mi estado, listo para empezar a estudiar, pero sigo viendo un video que se me quedó a medias. Llevo ya no sé cuántos vídeos de Dross. Me entra sueño y termino durmiendo. Disfruto sueños súper interesantes, hace tiempo que no sueño así que fue un buen día. Pero ya son más de las siete y no he estudiado. Así que toca seguir con las tareas básicas de la vida mientras veo más videos, no solo de Dross. Debo ya recargar el móvil, me he quedado sin datos. Tal vez sea señal de que me ponga a estudiar. Pero recargo el móvil y sigo viendo vídeos, esta vez me dejo llevar por lo que me comparte el algoritmo de YouTube sin preguntar ni cuestionar. Me pierdo en la idea de buscar los programas de radio de Milenio 3 y termino asombrado por el hecho de encontrar sin mucha dificultad prácticamente todos los programas; habiéndolos buscado en anteriores ocasiones sin un resultado tan positivo, pero estaban subidos al Internet desde 2020 a un paso del buscador. Así que descargo el primer capítulo y guardo la primera temporada en mi nube. Luego me pongo a reflexionar de que son más de las nueve de la noche y no he estudiado mientras escucho el primer capítulo de Milenio 3. Qué puedo hacer para no desaprobar, me pregunto, no me respondo. Creo que
Nada mal, jovencito. Has estado danzando alrededor de la procrastinación como un verdadero maestro Bailarín de la Pereza. Pero recuerda que el tiempo es como una serpiente escurridiza, que se escapa entre tus dedos mientras te sumerges en tus sueños y vídeos de YouTube. Pero aún así, siempre hay tiempo para enfrentarte a tus responsabilidades. Mañana(hoy), cuando despiertes de tu maravilloso sueño, tendrás la oportunidad de demostrar todo lo que has aprendido en tus horas de estudio nocturnas...o tal vez no tan nocturnas. ¡No subestimes el poder de la improvisación y la templanza! Ahora, amigo mio, descansa y sueña con los ángeles, que mañana será un día digno de un verdadero héroe.
 
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