La verdad Desnuda

La Mentira le dijo a la Verdad:

"Vamos a darnos un baño juntos, el agua del pozo es muy agradable.

La Verdad, todavía sospechosa, probó el agua y descubrió que era realmente agradable.
Así que se desnudaron y se bañaron.
Pero de repente, la Mentira saltó del agua y huyó, vistiendo las ropas de la Verdad y llevándose las suyas propias.

La Verdad, furiosa, salió del pozo para recuperar su ropa.
Pero el Mundo, al ver la Verdad desnuda, miró hacia otro lado, con ira y desprecio.

La pobre Verdad regresó al pozo y desapareció para siempre, ocultando su vergüenza.

Desde entonces, la Mentira corre por el mundo, vestida como la Verdad, y la sociedad está muy feliz ...

Porque el mundo no desea conocer la Verdad desnuda.



aqui les dejo una de las mejores moralejas, Hay más, expresa la tuya
Acostumbramos a mentir y ya es parte normal de nuestras vidas, y no lo vemos mal, es una mentirita piadosa,
tuve que mentir por su bien, es una mentira blanca, si le digo la verdad como va reaccionar, que va a pasar.
Estas y muchas mas son las frases que usamos para mentir y cada día acostumbramos mas a ella, haciéndola parte diaria de nuestras vidas.

NO deseamos conocer la verdad desnuda...

Creo que una verdad es mas beneficiosa que una mentira, es verdad que duele a veces aceptar la verdad pero es mejor que engañar o mentir, al final la mentira se descubre y au que haya sido para nocauar dolor o malestar a la otra persona se nos juzga y se nos reprocha el no haber contado la verdad en el momento determinado.

Es que la verdad duele mucho, jefeeeee!!!
Es mejor decir una mentirilla piadosa de vez en cuando, asi es como se mantienen las apariencias. Todo el mundo sabe que es mentira (hasta la gallina turuleca), pero nadie soporta la verdad.

Aunque la verdad duela, el dolor se supera. La mentira se suele descubrir eventualmente, y cuando esto ocurre puede doler aún más que conocer la verdad desde el principio.

Mi criterio, hay ocasiones que uno prefiere omitir la verdad que aventurarse a verle la cara cuando se trata de un amig@, pareja o familia, a veces hasta en el trabajo. Hay verdades que alejan cuando en realidad ese no es el objetivo y muchas veces uno quiere "ahorrarle" el mal rato a esa persona sin pensar que no es quizás lo más correcto, pero así lo amerita el momento.

Con el pasar de los años uno va aprendiendo lo que la vida le muestra o enseña a cada cual. Yo en ocasiones , prefiero no estár donde estaba y no ver lo que sí vi, así es difícil ser testigo de algo que no me incumbe o que pueda lastimar a alguien que aprecio. No es cobardía, es experiencia de que no hay peor ciego que el que no quiere ver.

Hay otras mentiras que se dicen para aliviar una pena, un dolor, o levantarle el ánimo a alguien y así ayudarlo de alguna manera, estas las creo de vez en cuando necesarias aunque no dejen de ser mentiras tienen un buen propósito.

Sin embargo hay quien miente para sacar provecho o beneficiarse con algo. Hay quien miente por quedar bien con alguien a sabiendas de que está haciendo mal, lastima a una tercera persona y aún así lo hace. Está el que miente por costumbre y el que miente por miedo. Estas creo que son las peores, las que traicionan y separan por ambición o por ego.

Pero a pesar de todo esto no creo que exista ser humano libre de mentiras, ya es como un recurso que usamos diario o para proteger a alguien, algo o a nosotros mismos o como algo ya común en la mayoría de las personas. Ya es tan común mentir, engañar o salirse con la suya a cualquier costo que creo que hemos perdido ciertos recursos que antes eran más válido que cualquier dinero del mundo, me refiero a la palabra empeñada, a la moral o simplemente a quedar bien. Recuerdo que mi abuelo me contaba que antes sin dinero comía tu familia, que no tenía que tener una gran entrada de dinero, solo cumplir con lo pactado y quedar bien, con eso había. Pero los tiempos cambian y con ellos las personas, por suerte aún quedan gente buena.

La gran realidad es que la verdad no es absoluta, ni los políticos, los gobiernos, los abogados, ni los maestros, los médicos, los medios de prensa y menos aún las redes sociales son portadoras de ellas. Ya la mentira es parte de nuestra cotidianidad y cada cual la interpreta a su forma, unos más crédulos que otros, unos más listos que la mayoría. Este mundo a puras verdades se vendría abajo y es por nosotros que no aprendemos de ella y la vemos como un arma punzante a la que toca defenderse y refutar con otra "verdad" que le haga daño a esa otra persona. Con esto no digo que no existan personas buenas, yo conozco a muchísimas pero al final de alguna u otra forma todos alguna vez mentimos.